lunes, abril 03, 2006

No puedo

No puedo saber del tiempo en tu intangible derrotero

y conjeturar con tus palabras el origen de tus imágenes.


No puedo saber de la luz en tus quebrados gemidos

y elevarte en las caricias de vastas y diversas lejanías.


Elevarte en el deleite de un beso me vuelve de laberintos,

de inasibles y secretas sombras, de incorruptibles deseos.


Y me divides en la incesante y repetida mirada del espejo,

en los ponientes de tus senos, en los yerros de tus piernas.


Tus labios son las pausas en la simetría de la esperanza,

en los sueños del hijo, en el poder de tu afligido abrazo.


No puedo repetirme en tu horizonte sin morir en tu verso,

sin vivir en el instante preciso que engaña viejas memorias.


Y me repites en tus gastados secretos y tus inertes agonías.

Me repites en un intermitente cielo y un constante infierno.


Rolando del Pozo